Cómo construir una estrategia de integración más sólida para las personas de origen inmigrante: el proyecto INTEgreat

Las políticas actuales de España son ligeramente más inclusivas que las de otros países de la UE, según la Índice de la política de integración de los inmigrantes en 2020. Como parte del proyecto INTEgreat, Open Cultural Center llevó a cabo una investigación sobre la integración en España en los ámbitos de la salud, el empleo, la formación y la cohesión social. Las conclusiones fueron claras: los resultados de la investigación muestran que los recién llegados se enfrentan a varios obstáculos para acceder a los servicios esenciales. Además, el sistema de integración español carece actualmente de una estrategia nacional sólida en materia de integración.

¿Cuál es la situación de la integración en España?

Desde 2018, el país ha experimentado un aumento significativo de la población de solicitantes de asilo, sobre todo debido a las nuevas llegadas procedentes de Venezuela y Colombia, lo que lo convierte en uno de los mayores receptores de solicitantes de asilo de la Unión Europea. Los resultados muestran que, si bien España ha sido capaz de implementar reformas que favorecen la inclusión de las personas de origen migratorio en el país, existen varias deficiencias que les impiden acceder fácilmente a servicios clave, especialmente en el ámbito de la salud y el empleo. 

En el salud sector, las personas inmigrantes se benefician de servicios receptivos, pero las barreras administrativas y la falta de información en su lengua materna dificultan su pleno acceso a ellos. Las barreras lingüísticas también afectan a la empleo y formación oportunidades, así como su capacidad para validar sus diplomas y acceder a las redes. En términos de cohesión social, las personas que sufren discriminación pueden beneficiarse de fuertes mecanismos de aplicación, pero el organismo de igualdad del país es débil. El acceso a la nacionalidad es también el principal punto débil de España.

Por último, las mujeres inmigrantes, especialmente las que tienen hijos pequeños, presentan múltiples factores de vulnerabilidad que las exponen a un mayor riesgo de aislamiento social y soledad, ya que no disponen de recursos sociales fuera de sus lazos familiares o de sus comunidades. 

¿Cuál es la situación de la integración en Cataluña?

Cataluña, como comunidad autónoma, tiene algunas competencias en áreas directamente relacionadas con la integración de los inmigrantes. Las principales áreas son la educación y la sanidad. El Estado central controla y aprueba la legislación básica sobre estas competencias, pero es responsabilidad de Cataluña desarrollarlas y aplicarlas. Por otro lado, cabe destacar que Cataluña tiene competencias exclusivas en otras dos áreas fundamentales relacionadas con la inmigración: la vivienda y la asistencia social, aunque en ambas es necesaria la importancia de los acuerdos con el Estado. 

Cataluña, al igual que España, experimentó un aumento considerable de las llegadas de inmigrantes y refugiados. Concretamente, entre 1996 y 2015, el número de extranjeros empadronados en Cataluña pasó de 97.789 a 1.023.398 y, en la actualidad, representa el 11,6% de la población total.

En 2008, el Gobierno de Cataluña y diversos agentes institucionales, políticos, económicos y sociales firmaron el Acuerdo Nacional para la Inmigración. Su objetivo es lograr (1) la gestión eficaz de los flujos migratorios y el acceso al mercado laboral; (2) la adaptación de los servicios públicos a una sociedad diversa con un servicio de acogida universal; y (3) la integración en una cultura pública común que fomente la participación en la vida pública, el catalán como lengua común, la pluralidad religiosa y de creencias, la igualdad de género y el refuerzo de las políticas sociales.

¿Qué papel desempeña en ello el proyecto INTEgreat?

INTEgrande es un proyecto de 3 años financiado por la Unión Europea, iniciado en enero de 2022, que reúne a municipios, organizaciones sin ánimo de lucro, el mundo académico y las sociedades civiles para crear un marco innovador de estrategia de integración. Su objetivo es construir una estrategia y un ecosistema de integración más sólidos para los inmigrantes y solicitantes de asilo (mujeres, hombres, familias, LGBTIQ) en Europa, en cuatro áreas principales: asistencia sanitaria, empleo, capacitación y formación de inmigrantes y ciudadanos locales, y cohesión social. El impacto esperado es la mejora de las políticas migratorias mediante la creación de una estrategia de integración innovadora aplicable a nivel de la UE que facilite una inclusión más armoniosa de los inmigrantes en la sociedad.

Durante el primer año, las organizaciones asociadas llevaron a cabo labores de investigación en sus propios países (Italia, España, Grecia, Chipre e Irlanda) para evaluar el estado actual de las políticas nacionales de integración e identificar las mejores prácticas y los puntos ciegos. En los próximos meses, los socios trabajarán en el desarrollo de un Marco Estratégico de Integración (ISF) participativo y lo pondrán a prueba mediante actividades piloto para promover mejor la integración en sus respectivos países a través de métodos eficaces.